martes, 11 de agosto de 2015

La entrega de Barbie

El pasado miércoles vivimos uno de los momentos más dulces y a la vez amargos de cada dulce detector, su entrega.

Entregar un perro de alerta médica a su familia trae consigo un montón de emociones, la alegría de pensar que ya no tendrán que esperar más para tenerlo, para empezar con los primeros ejercicios y, en muy poco tiempo, comenzar a disfrutar de las innumerables ventajas que aporta al control de la diabetes. 

Pero, a su vez, una parte queda triste aunque satisfecha. La familia de tutela siente la tristeza del vacío que el dulce detector dejará en su casa, las despedidas siempre son difíciles. Pero, a la vez, siente como con su gran aportación han hecho posible un proyecto que cambiará la vida de una familia.

Cuando Barbie se fue con Sofía y su familia, ya había marcado tres hipoglucemias reales durante el curso de interpretación. ¡Es una dulce detectora de nota!

Desde aquí, queremos dar las gracias a Diego y a toda su familia, la tutela de Barbie, por su constanza al traerla a entrenar, su cariño y los innumerables cuidados que le han dado a la perrita. Habéis hecho un trabajo estupendo, enhorabuena.